Se prevé que el parque presentado cómo “el más importante de la Patagonia” entre en operaciones en octubre de 2025 con una capacidad de 10 MW. La construcción comenzará en febrero y ocupará un terreno de 100 hectáreas.
El proyecto fue anunciado en un acto por autoridades provinciales y municipales en el marco de la exposición U20 en Brasil. El intendente de Nequén, Mariano Gaido aseguró que el proyecto cubrirá la zona árida y poco productiva lindera a la capital para generar energía limpia a la población.
La obra será a partir de una colaboración conjunta entre provincia, municipio y la distribuidora local CALF (Cooperativa de Agua, Luz y Fuerza), que se encargará de diversos aspectos de la infraestructura y operación del parque. Se destacó que la capacidad de generación de esta planta solar será equivalente al consumo de un cuarto de lo que actualmente demanda toda la ciudad de Neuquén, que cuenta con aproximadamente un millón de habitantes.
El intendente anticipó en la cumbre que “el municipio aporta las tierras, mientras que la CALF se encargará de desarrollar el proyecto ejecutivo y licitar la construcción”.
El anuncio original de este parque solar se realizó en noviembre de 2021, cuando se firmó un acuerdo de asistencia técnica con ABH Holdings, un banco multinacional con sede en Europa, que brindará apoyo en la ejecución de la obra. El gobernador Rolando Figueroa remarcó la importancia del trabajo conjunto entre provincia y municipio para llevar adelante el proyecto.
Este será el primer parque solar de la región con tal capacidad instalada, lo que posiciona a Neuquén a la vanguardia como provincia energética no solo en hidrocarburos, sino también en renovables.
El desarrollo de la energía solar en regiones desérticas como la Patagonia es de vital importancia debido a las condiciones geográficas y climáticas que favorecen la generación de energía limpia. Con vastas extensiones de terrenos soleados y baja nubosidad, la Patagonia ofrece un muy buen entorno para la instalación de parques solares. La alta radiación solar que recibe esta región a lo largo del año permite la generación de energía a gran escala, lo que no solo contribuye a diversificar la matriz energética, sino que también puede reducir la dependencia de fuentes de energía no renovables y disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Además, la implementación de proyectos solares en la Patagonia tiene el potencial de impulsar el desarrollo económico local y regional. La creación de infraestructuras energéticas fomenta la generación de empleo y la transferencia de tecnología, mejorando las capacidades técnicas de la población y abriendo nuevas oportunidades en sectores relacionados con la energía renovable. La inversión en energía solar también puede contribuir a la descentralización del suministro eléctrico, mejorando la seguridad energética en una región extensa y de difícil acceso, lo que, a su vez, favorece el crecimiento sostenible y la autosuficiencia energética en la región.