América Latina y el mundo hoy están apostando fuerte por esta tecnología que contribuye a garantizar la seguridad energética y la estabilidad de la fuente para el consumidor y en la propia red cuando funciona en sistemas on grid.
Un ejemplo concreto que muestra el rápido avance de esta tecnología es que recientemente Brasil aceptó el almacenamiento de energía de gran capacidad como fuente de generación dentro de la matriz energética. Este es un hecho muy importante en el proceso de transición energética tanto en Brasil, América Latina y el mundo. El almacenamiento de energía es futuro.
El sector del almacenamiento se divide en dos mercados bien definidos. En primer lugar, se encuentra el mercado mayorista, que incluye a los servicios públicos de gran generación. Por el otro, destaca el mercado minorista, más disperso, que incluye a los usuarios residenciales, pequeños negocios o aplicaciones 100% off grid. A partir de su desarrollo, surjen dos interrogantes, ¿es esta tecnología técnica y económicamente viable hoy en día? Sí, como todo mercado es una cuestión de oferta y demanda. Es una fuente segura y renovable y hoy contamos con baterías de litio de alto rendimiento en el mercado que satisfacen las necesidades de clientes específicos.
Para garantizar el respaldo de los grandes generadores y satisfacer la demanda de los grandes consumidores, se requiere un almacenamiento de gran escala conocido como BESS (Battery Energy Storage System). Para clientes de menor potencia, escala residencial, trabajamos con la batería de litio, que varía de 3 a 10 kilovatios.
El surgimiento de la tecnología fotovoltaica comenzó en sistemas aislados, luego en los años 90 pasó a una segunda etapa pasando a formar parte de los sistemas interconectados a la red eléctrica, el famoso sistema on grid. Con la imperiosa necesidad de reducir emisiones en paralelo con el aumento cada vez más mayor de la demanda de energía a nivel mundial, ya sea de fuentes renovables o de combustibles fósiles, el desarrollo del almacenamiento surge cada vez más como una valiosa oportunidad de cara al futuro, para cubrir las nuevas demandas que los nuevos tiempos nos demandan, como la movilidad eléctrica y la IA, mediante la electrificación, garantizando en última instancia la seguridad energética.
Esta situación nos demanda ir hacia un mundo cada vez más sostenible, con una mejora en la reducción de CO2, para reducir los efectos del cambio climático. Es en este contexto donde el desarrollo de las energías renovables juega un papel fundamental y con ello el desarrollo de sistemas de almacenamiento para garantizar la energía de respaldo.
Sin embargo, más allá de los avances continuos que se viene suscitando, todavía nos falta superar el obstáculo de la viabilidad financiera, pese a esto los sistemas de almacenamiento continúan ganando terreno en el mercado global. A pesar de que su valor sigue siendo relativamente alto en comparación con otras fuentes, hay que recordar que a largo plazo es sumamente eficaz y económico.
Hoy en día, el acceso a la energía es un derecho, el almacenamiento permite garantizar eso ante interrupciones, como pueden ser cortes de energía. El almacenamiento permite disponer de energía tanto en mi hogar, en mi empresa y en mi industria. Recordando además que el almacenamiento a gran escala contribuirá a diversificar la matriz energética, mejorando directamente la red de transmisión, su operación y mantenimiento.
La movilidad eléctrica demandará mejoras constantes en el almacenamiento, ya que la proliferación de vehículos electricos requerirá necesariamente progresos más efecientes de las baterías y una baja en sus costos.
China se ha ido posicionando con mucha fuerza en este mercado del almacenamiento durante todo su proceso de fabricación, pero también su uso a gran escala. Sin embargo, otros mercados apuntan hacia el comercio minorista, donde habrá que entender la viabilidad técnica y financiera, de un proyecto a otro. Pero les puedo asegurar que es un camino irreversible para la tecnología dentro de las energías renovables.
A continuación se muestran algunas aplicaciones para el sistema de almacenamiento de baterías:
a) Generación Fuera de la Red: permite la generación y uso de energía en lugares remotos o aislados de la red eléctrica convencional.
b) Reserva de Capacidad (flexibilidad): suministro rápido de energía adicional en momentos de alta demanda o interrupciones.
c) Generación Híbrida (UFV + Eólica): integración de múltiples fuentes de energía para garantizar un suministro continuo y estable.
Transmisión y distribución
a) Aplazamiento de Inversiones: pospone la necesidad de ampliar la infraestructura eléctrica, ahorrando costos.
b) Nivelación de Carga: distribuye la energía de manera uniforme, evitando sobrecargas en la red.
c) Calidad (DEC/FEC): mejora los indicadores de continuidad y calidad del suministro energético.
d) Regulación de Voltaje y Frecuencia: mantiene el voltaje y la frecuencia eléctricos dentro de límites aceptables.
e) Modernización de la Red: contribuye a la transición hacia redes eléctricas más inteligentes y eficientes.
f) Mantenimiento: facilita el mantenimiento y reparación de la infraestructura de transmisión y distribución.
g) Microrredes: permite sistemas energéticos autónomos e independientes.
Comercio, Industria, Agronegocios
a) Respaldo/Calidad: proporciona energía de respaldo en caso de interrupciones, asegurando la continuidad de las operaciones.
b) Peak Cutting: reduce los costos de electricidad al recortar el consumo directo de la red en las horas pico.
c) Control de la Demanda: gestiona y optimiza el uso de la energía para evitar picos de consumo y ahorrar recursos.