El año 2023 comenzó con buenas noticias para aquellos usuarios de energía solar o quienes querían comenzar a adentrarse en ese sustentable y ahorrativo mundo, ya que la provincia de Buenos Aires reglamentó la Ley de Generación Distribuida, un pedido que estaba demorado años y que en otras provincias ya se aplicaba.
Concretamente, la norma habilita a que todos los bonaerenses que instalen paneles solares en sus hogares, puedan inyectar la energía excedente a la red eléctrica y por ello recibir descuentos impositivos.
Mediante la implementación del Decreto reglamentario N°2371/2022 de la Ley 15.325, los vecinos de la provincia de Buenos Aires pueden hoy convertirse en “Usuarios-Generadores” (UG) a través de la instalación de paneles solares en sus domicilios. De esta manera estarán habilitados para la generación de energía por fuentes renovables para el autoconsumo y para poder generar un excedente que les reditúe una ganancia, mediante exenciones en Ingresos Brutos y en el Impuesto al Sello.
Así, la promesa es el doble beneficio con dos exenciones impositivas por 12 años: el impuesto a los Ingresos brutos por la inyección de los excedentes de energía renovable a la red de distribución; y el impuesto de Sellos a los contratos que suscriban los usuarios con las empresas distribuidoras.
Pero con el correr de los meses, los usuarios comenzaron a observar problemas en la puesta en marcha de esta posibilidad que el decreto les concede. Y durante agosto, decenas de empresas instaladoras de energía renovable, usuarios, proveedores de equipos fotovoltaicos, ONGs y organismos de desarrollo hicieron y apoyaron una petición para que la Provincia de Buenos Aires mejore las condiciones técnicas exigidas a las instalaciones de energía distribuida.
Los vecinos elevaron una misiva a Leonardo Javier Nardini, ministro de Infraestructura y Servicios Públicos del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, detallando los puntos problemáticos de la reciente norma provincial y al mismo tiempo propusieron algunas soluciones para mejorar la actual situación que viven.
En la carta, los solicitantes firmantes con número de documento, pidieron simplificar el procedimiento de generación distribuida para que sea fácil su adopción por parte de los usuarios y generadores de energía. Por ello, consideraron esencial que se elimine el requisito de tener dos medidores bidireccionales, lo cual les resulta “innecesariamente costoso y contraproducente”, tanto para los clientes como para las distribuidoras y que solamente sea exigible la instalación de uno solo.
También solicitaron que se permita la inyección de energía en el tablero eléctrico de la vivienda, siguiendo los estándares técnicos adecuados y la experiencia positiva de muchos clientes en otras provincias que han adoptado el marco más sencillo de la Ley Nacional 27.424.
Los peticionantes alertaron que atraviesan en la actualidad aumentos significativos en las tarifas energéticas, como para hacer una doble erogación en un medidor bidireccional, hecho que no alienta ni favorece la incorporación masiva de energías renovables por parte de cada vez más usuarios.
De hecho, aseguran que la implementación de este marco actual de la Generación Distribuida bonaerense “es impracticable” y “no solo representa una carga económica injustificada, sino que también dificulta y desincentiva la transición hacia un sistema energético más sostenible”.
“Además del elevado costo del cableado, se suma el costo de la mano de obra y los trabajos necesarios para llevar a cabo la instalación adicional. En muchos casos, la obra puede suponer sobrecostos al instalar el sistema de paneles, romper veredas, ampliar nuevos pilares, acondicionar mampostería y realizar obras edilicias más complejas, lo cual desalienta definitivamente la adopción masiva de fuentes de energía renovable y deja potencialmente a muchos usuarios fuera de la generación distribuida. El pilar para colocar los nuevos medidores puede llegar a tener un tamaño excesivo que muchas construcciones no podrán adecuar ni por espacio, ni por la magnitud de la inversión que representaría”, afirman en el documento.
Los convocados en el escrito precisaron que también existen problemas porque no se reconoce en la provincia de Buenos Aires el cambio de encuadre tarifario por reducir la demanda eléctrica de red al autoconsumir, lo que va en contra del derecho al autoconsumo y en contra de los principio de promoción de la eficiencia energética. Eso evidencia que “no se está dejando al usuario ser más eficiente al impedir bajar la categoría con sus mejoras de autoconsumo”. Y acusan que la actual reglamentación “desalienta seriamente la instalación de energía renovable y, a la vez, alienta las conexiones no declaradas de sistemas renovables híbridos con bloqueo de inyección a la red, representando esto irregularidades y potenciales inconvenientes de seguridad eléctrica”.
Por último, afirman que el marco normativo actual provincial no se alinea con el marco nacional, lo cual implica que los usuarios generadores bonaerenses no pueden tener acceso a los beneficios fiscales de la ley nacional, lo que representa un desaliento más que hace menos atractivo el desarrollo de la generación distribuida en el territorio más poblado del país.
Para finalizar, los firmantes enfatizaron que la solicitud no surge de intereses particulares, sino que proviene de la preocupación de gran cantidad de instaladores y cientos de usuarios comprometidos con la generación distribuida.
Generación Distribuida en el país
En 2018 el mundo se volcó fuertemente a la energía fotovoltaica y en Argentina el desarrollo de la energía solar comenzó a adquirir una gran importancia a partir de la implementación de la Ley de Generación Distribuida (GD), que entró en vigencia en 2019, por la cual es posible colocar paneles solares en los techos de las casas para además de consumir energía solar, tener la posibilidad de vender el excedente producido a las distribuidoras eléctricas.
Hasta el momento, en el país sólo hay 14 jurisdicciones asociadas a la Generación Distribuida o producción eléctrica a pequeña escala a través de tecnologías de energías renovables ubicadas en las proximidades de los centros urbanos y las redes de distribución para autoconsumo y eventual inyección de excedentes en hogares, edificios, industrias y PyMES.
En total son 218 las Distribuidoras y Cooperativas inscritas y hay 1212 proyectos que completaron la instalación y se convirtieron en usuarios-generadores.
Respecto a la potencia instalada en el país, la provincia de Córdoba lidera con comodidad al contar con un 47%. Le sigue Buenos Aires con 24%, San Juan con 9%, CABA con 8%, Mendoza con 5% y el resto oscila entre el 1 y 2%.